La tendinitis es una de las lesiones más comunes tanto en deportistas como en personas con trabajos o rutinas que implican movimientos repetitivos. Identificar sus síntomas a tiempo y conocer las mejores estrategias para prevenir recaídas es clave para una recuperación completa.
Qué es la tendinitis y cómo afecta a los tendones
La tendinitis es una inflamación o irritación de un tendón, que es la estructura fibrosa que conecta los músculos con los huesos. Esta condición puede causar dolor y sensibilidad justo fuera de una articulación.
Los tendones son esenciales para el movimiento, ya que transmiten la fuerza generada por los músculos para mover las articulaciones. Cuando se inflaman, el movimiento se vuelve doloroso y limitado.
Esta lesión no solo afecta a deportistas o personas con trabajos físicos, sino que puede presentarse en cualquier persona que realice movimientos repetitivos o que sobrecargue sus tendones sin el descanso adecuado.
La tendinitis puede afectar diferentes partes del cuerpo, siendo las áreas más comunes el hombro, el codo, la muñeca, la rodilla y el tobillo.
Síntomas principales para identificar una tendinitis
El síntoma más evidente de la tendinitis es el dolor localizado en la zona del tendón afectado, que suele empeorar con el movimiento o la actividad física. Este dolor puede ser leve al principio, pero tiende a intensificarse si no se trata a tiempo.
Además, es común que aparezca rigidez, especialmente después de periodos de inactividad, como al despertar por la mañana.
También puede notarse inflamación o hinchazón en el área, junto con sensibilidad al tacto. En algunos casos, la piel sobre el tendón puede estar caliente o enrojecida.
Si la tendinitis avanza, el dolor puede persistir incluso en reposo, afectando la calidad de vida y limitando las actividades diarias.
Otro síntoma que puede presentarse es la sensación de crujido o chasquido al mover la articulación asociada al tendón afectado. Este fenómeno, conocido como crepitación, puede ser alarmante y a menudo indica que el tendón está sufriendo una tensión excesiva.
Causas más habituales de la lesión tendinosa
La tendinitis suele originarse por el uso excesivo o movimientos repetitivos que someten a los tendones a una tensión constante.
Por ejemplo, actividades como levantar objetos pesados, practicar deportes como tenis o correr sin el calentamiento adecuado, o realizar tareas laborales que impliquen movimientos repetitivos pueden desencadenar esta lesión.
Otra causa común es la falta de calentamiento o estiramiento antes de la actividad física, lo que aumenta el riesgo de sobrecarga. Además, factores como la edad, que reduce la elasticidad de los tendones, y ciertas enfermedades metabólicas o inflamatorias pueden predisponer a sufrir tendinitis.
Beneficios de la fisioterapia para tratar la tendiditis
La fisioterapia es una herramienta fundamental para el tratamiento efectivo de la tendinitis. A través de técnicas específicas, se busca reducir la inflamación, aliviar el dolor y recuperar la funcionalidad del tendón afectado.
Los fisioterapeutas pueden aplicar métodos como la terapia manual, ejercicios de fortalecimiento y estiramientos controlados.
Además, la fisioterapia ayuda a corregir patrones de movimiento que puedan estar causando la lesión, evitando así que se repita. La aplicación de ultrasonidos, láser o electroterapia también puede acelerar la recuperación.
Un plan de tratamiento personalizado asegura que cada paciente reciba la atención adecuada según su condición y estilo de vida.
Cómo prevenir recaídas y cuidar tus tendones
Prevenir una recaída en la tendinitis implica adoptar hábitos que protejan los tendones y reduzcan la tensión sobre ellos.
Es fundamental realizar un calentamiento adecuado antes de cualquier actividad física y mantener una rutina de estiramientos que mejore la flexibilidad. También es importante respetar los tiempos de descanso para evitar la sobrecarga.
Incorporar ejercicios de fortalecimiento específicos para los músculos y tendones ayuda a aumentar su resistencia. Además, mantener una postura correcta durante las actividades diarias y laborales puede reducir el estrés sobre los tendones. En caso de sentir molestias, es recomendable actuar de inmediato para evitar que la lesión empeore.
Por qué elegir Fisionos para tratar tu tendinitis en Palma de Mallorca
En Fisionos destacamos en Palma de Mallorca por nuestro enfoque integral y personalizado en el tratamiento de la tendinitis. Nuestro equipo de fisioterapeutas expertos utiliza técnicas avanzadas y adaptadas a cada paciente, garantizando una recuperación eficaz y segura. Además, ofrecen un seguimiento continuo para evitar recaídas y promover hábitos saludables.
Contamos con tecnología de última generación que complementa los tratamientos manuales, acelerando la reducción del dolor y la inflamación. Nuestra experiencia y dedicación hacen que seamos una opción confiable para quienes buscan recuperar la movilidad y calidad de vida tras una lesión tendinosa.
